La semana pasada el Secretario de Salud Armando Ahued anunció que 30,000 perros callejeros serán sacrificados en la Ciudad de México en lo que resta del año. La medida es parte de su propuesta para el Manejo de Animales de Compañía, nueva política que se presentó ante la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Agregó que surge como una “atención urgente y decidida” a la sobrepoblación canina que genera problemas de salud y contaminación.
En sus declaraciones, reconoce que estas acciones son en parte detonadas por la solicitud de algún comité vecinal. Agrega que de cada 10 perros capturados, 9 son sacrificados pues sus dueños no los reclaman.
El secretario Ahued opta por la salida fácil, por una medida que no soluciona el problema. Es bien sabido que las matanzas de perros no resuelven nada, es una medida ineficaz y anti-económica. Argentina actualmente tiene un escenario similar y algunas comunidades han optado por enfrentar el problema por medio de la esterilización. Ejemplos notables (y exitosos) de esto son la comunidad de Almirante Brown, Ciudad de Mendoza y San Isidro. El programa de esterilización se aborda con un criterio epidemológico, se ataca de forma masiva y al ser aplicado de forma correcta funciona como una gran inversión, pues resulta más económico que sacrificar al animal y disminuye los casos de zoonosis (cualquier enfermedad transmitida de animales a humanos) así como los costos de su tratamiento.
En palabras del Diario Digital de la República Argentina: "Estas acciones deben ir de la mano de un plan educativo, y de legislación que lo respalde. Porque sabemos que gobernar es educar, y son las acciones del gobernante las que son pedagógicas para toda la sociedad. Es decir, se debe abandonar el doble discurso, y transformarse en el espejo para el cambio."
Ahued, ¡pon atención! Educar, no exterminar, EDUCAR. No es coincidencia que los perros callejeros se puedan encontrar en mayor cantidad en zonas marginadas.
Hay gran cantidad de alternativas a su propuesta de exterminio como la esterilización temprana antes mencionada, implementar programas de adopción para sensibilizar y concientizar a la comunidad e incluso el uso de estos animales como perros policía o lazarillos. Y más importante aún, la educación a un pueblo con poca o nula educación, que ven en una mascota un capricho que durará unos meses, mientras el perro sea cachorro, que al poco tiempo se convertirá en una carga por la responsabilidad que lleva consigo, por no contar con los recursos suficientes para alimentarlo, para cuidarlo. Entonces optará de forma irresponsable por abandonarlo, por echarlo a la calle.
De poco o nada sirve matar 30,000 perros callejeros si la comunidad (esa misma que hace la solicitud a la Secretaria de Salud para que los perros callejeros sean sacrificados) los seguirán echando a la calle a su suerte. A que se reproduzcan de nueva cuenta y en unos meses tendrás otros 30,000 perros callejeros. Sabemos de su poco respeto a la vida, pero véanlo por el lado monetario, ¿cada cuánto estarás realizando estas matanzas? ¿cuánto gastarás en ellas?
Sacrificar no es la solución. Esterilización. Responsabilidad. Educación.
No debemos olvidar que la existencia de los perros callejeros refleja el grado de sensibilización y humanización de una sociedad. Es por eso que no me sorprende ésta situación en mi país, pero el que no me sorprenda no hace que deje de doler.
Comments (5)
Un beso y un abrazo no disminuirán ni su enojo, ni su dolor, pero al menos le harán saber que no está solo. Saludos.
comparto tu opinión, es una medida que ni siquiera es una solución definitiva. Es un problema con raíces muy profundas, que seguirá ahí mientras no haya un plan educacional para la población y sobre todo para esa parte que adquiere un perro por capricho y no se hacen concientes de que es una responsabilidad, una vida que compartirá la suya con nosotros. Una pena, es una iniciativa floja, sin fondo, típica de aquellos que “limpian donde ve la suegra”. A mi también me causa mucha pena e indignación. Ver perros en azoteas abandonados, maltratados y solos son de las cosas que tuercen mi corazón.
Una persona que es capaz de maltratar un animal indefenso y es capaz de hasta matarlo con la excusa de “es sólo un perro” no merece ni pena, sólo desprecio, ósea desvalorización de su condición como humano. Así pienso yo, una persona que hace eso no merece el respeto de nadie.
Un abrazo y te extraño mucho, deveras se te extraña amigo.
Coincido contigo amigo, el problema no se solucionará sacrificando millares de perros pues aún con eso después serán millares más y cuento de nunca acabar. La esterilización me parece una medida adecuada pero además me gustaría agregar algo:
Las personas deben dejar de ver a los perros (y a otros animales, pero en este caso a los perros) como objetos. Y no sólo los ven así los que los maltratan o están dispuestos a matarlos, de la misma manera los ven quienes se paran en una tienda de mascotas o a las afueras de una tienda departamental donde les venden un perro y lo compran. ¿Cuánto vale la vida? Parte de las medidas que se deberían tomar es erradicar la compra-venta de perros pues mientras haya compradores gente seguirá vendiendo y "cruzando" perros a diestra y siniestra, obteniendo objetos de deseo socialmente más valiosos que un perro criollo que espera en una perrera o en un asilo el tener un hogar el cual también merece.
No sé, a mi me dan pena las personas ignorantes que compran perros. Abatamos la ignorancia con acciones.
Un abrazo y buen inicio de semana.
Es una pena, el que problemas como estos se presenten en nuestro país, y que soluciones tan superficiales se acepten y se lleven a cabo. Es mas que obvio que sacrificar a estos animales, nada soluciona, pero creo que su cerebro no les da para mas.
Muchos de los grandes problemas radican en la falta de educación y de sensibilidad de las personas y lo mas preocupante, de los niños, que son las nuevas generaciones.
Claro esta que se debe implementar un plan educacional para atender estos problemas y sensibilizar a los niños desde temprana edad, pero no solo es responsabilidad del gobierno y las escuelas, si no también de los padres y de la educación que se da desde la casa.
Culpa de esos padres que compran perros como si fueran juguetes para sus hijos y cuando se cansan los echan a la calle.
Un perro puede ser una compañía, un amigo, una mascota, pero lo mas importante, es un ser vivo y como cualquier ser vivo, merece respeto.
De verdad que estas cosas se me hacen indignantes.
Saludos...
Antes que nada gracias por su interés. Les comento que edité la entrada a manera de misiva y se la hice llegar al Secretario de Salud Ahued el 4 de Abril, ofreciendo incluso profundizar en alternativas para la problemática. No tuve confirmación de recepción, por lo que me estuve comunicando durante la semana a dicha dependencia. El día 8 de Abril me confirmaron la recepción del correo y se comprometieron a responder.
Un abrazo y les mantengo al tanto.